Hoy vengo con una especie de galletas muy crujientes y ricas que siempre me han gustado, cuando iba al super y las veía me las traía conmigo, me encantan!! cuando las publico María supe que las haría, me puse manos a la obra y ya no se cuantas veces las hice, si os gustan este tipo de galletas tenéis ante vosotros las ideales. María tenéis que visitarla tiene un blog maravilloso y con unas recetas divinas . Muchas gracias María por la receta..
INGREDIENTES:- 220 g de harina de fuerza + una poca para espolvorear
- 40 g de almendra molida
- 2 huevos medianos
- 5 g de levadura tipo royal (una cucharadita de café)
- 1 cucharadita de café de canela en polvo
- 30 ml de aceite de oliva suave (unas tres cucharadas)
- 140 g de azúcar
- Ralladura de medio limón, pequeño
- 100 g de almendra natural con piel (no tenia y la puse pelada)
- 1 pizca de sal
- Huevo batido para pincelar
PREPARACIÓN:
Yo amase a mano pero se puede hacer en una amasadora.
Tamizamos la harina en un bol y le incorporamos todos los ingredientes excepto las almendras con piel.
Mezclamos todo con una cucharada de madera o con las manos bien limpias, tiene que quedarnos una masa un poco pegajosa y compacta. A mano cuesta al principio un poco pero luego se maneja bien.
Incorporamos las almendras enteras hasta que se integren bien en la masa. Espolvoreamos la mesa de trabajo con un poco de harina y trabajamos la masa con las manos formando un cilindro (como si fuera una baguet) o dos, dependiendo de la bandeja del horno, de un grosor de 3 cm más o menos. Si nos hiciera falta un poco más de harina, la añadimos, la justa para que no se pegue a la superficie de trabajo.
La colocamos en una bandeja de horno cubierta con papel de hornear, tapamos los cilindros de mas con papel film y los metemos en la nevera como mínimo media hora.
Pasado el tiempo de reposo. Encendemos el horno a 180º calor arriba y abajo para que se vaya precalentando.
Retiramos la bandeja con los cilindros de la nevera y lo aplanamos un poco con los dedos para darle forma más ancha y menos redondeada. Pincelamos por encima con huevo batido.
Introducimos en el horno precalentado unos 20 minutos. Cuando haya pasado el tiempo lo retiramos y con un cuchillo bien afilado (de hoja lisa) cortamos rebanadas de 1 cm de grosor, en diagonal. Para cortarlo sin quemarnos nos podemos ayudar de un paño. Colocamos las rebanadas en la bandeja otra vez acostadas, en diagonal.
Las volvemos a meter al horno 5 minutos para que se doren un poco por los dos lados. Tenemos que tener cuidado de no excedernos con el tiempo de horneado, si no queremos que nos queden demasiado duros. Tenemos que tener en cuenta que al enfriar enduran. Una vez fríos ya los podemos guardar en botes, yo no pude hacerlo se comieron en un plisss...
Estas galletas son para nota, tienen una presencia escandalosamente buena y seguro que lo están. Que manos tienes para los dulces, te queda todo genial.
ResponderEliminarUn beso.
¡¡Hola Esther!! A mi me gustan mucho los carquiñolis, y eso que casi todos los que como son de compra, así que imagínate, como tienen que estar los tuyos, caseros y hechos a mano con mucho amor. Así te han quedado, ¡¡fabulosos!! Las fotos me han encantado, tanto como tus carquiñolis. Besitos.
ResponderEliminarHola Esther!! Qué maravilla de receta y de fotos!! no conocía los carquiñolis nunca los he probado, pero por la pinta tan maravillosa que tienen en las fotografías tienen que estar de rechupete, besotes
ResponderEliminarElena
Eres una artistaza! Menudas galletitas más preciosas que te han salido! Y de sabor deben estar uhmmm para acompañar con un cafetito ahora mismo, qué bien me venía jijij Besines
ResponderEliminarEu adoro doces com amêndoa, esses carquinolis ficaram maravilhosos
ResponderEliminarApetece mesmo provar
bjs
Seguro que si las tengo delante estoy pica pica y no duran un suspiro!!! Besiños.
ResponderEliminarEstos carquiñolis tiene que estar buenísimos, yo nunca los he probado aunque creo que tienen que ser parecidos a los cantuccini italianos, que por el aspecto son primos hermanos, je, je, je,...
ResponderEliminarbesos guapa, te han quedado de fábula.
Ni los he comprado, probado ni hecho en la vida.
ResponderEliminarPero te confieso que los tengo en pendientes hace tiempo y que después de ver los tuyos, has subido unos puestos en el tiempo de espera. Para que después digan que los chinos son los reyes del copieteo jaja, si parecen los mismos de la bandeja de María ;)
Te han quedado perfectos Esther, me han encantado.
Besotes gordos mi niña, feliz semana.
No los conocía...pero me parecen unas galletas muy ricas y crujientes!! la almendra entera le dará un sabor estupendo. Bs.
ResponderEliminarQue ricos y la de tiempo que hace que no los como!! Ahora con tu receta a ver si me animo que los caseros tienen que estar buenísimos.
ResponderEliminarBesos
A mi marido le chiflan los carquiñolis!! Así que tu receta me va requetebien, gracias. Bss.
ResponderEliminarTe han quedado de lujo, eres una artista!! estas galletas a mi padre le encantaban con un poquito de moscatel..
ResponderEliminarBss
Qué delicia, tendrán un sabor riquísimo!! es verdad que a veces vemos una receta y sin probarla ya sabemos que nos gustarán!!un beso
ResponderEliminarMe gustan mucho los carquiñolis pero los consumo comprados, estos tuyos caseros, relucen mucho mas y hasta me imagino el olorcito de tu cocina, ummm, parece que este ahí, te han quedado deliciosos!!
ResponderEliminarTe cojo un par de ellos para acompañar mi café.
Un beso
Yo no los conozco, sinceramente, pero vamos que estoy encantada de conocerlos, jajaja, madre mía qué cosa más rica! No me extraña que los hayas hecho muchas veces. Me guardo tu receta, a ver si me animo y me quedan tan ricos como parecen los tuyos.
ResponderEliminarUn beso preciosa
Queda alguna Esther? porque me voy a tu casa a merendar, me encantan! Los he descubierto hace bastantes años en Tarragona, más tarde los encontré como receta típica en la Toscana y más sitios, siempre están buenos, pero no cabe duda... que los caseros son los mejores, yo los hago muchas veces.
ResponderEliminarUn biquiño
No conocia estas galletas pero me parecen estupendas besitos
ResponderEliminarMe llevo dos para el café :)
ResponderEliminarTienen una pinta estupenda, yo nunca los he comido ni tampoco los he hecho, pero nunca es tarde y me llevo la receta.
ResponderEliminarBesos. Lola
Hola Esther! no habia visto este tipo de dulce o galleta, pero tiene una pinta divina. Ya me la ha anotado.
ResponderEliminarTengo una compañera diabética y el endulzante que le recomendo el médico y con el que no el sube los niveles de glucosa es la estevia, por si te sirve.De todas formas en el blog Thermofan, Marisa no puede tomar azúcar y utiliza tagatosa o algo parecido y tiene en su blog muchas mermeladas y recetas sin azúcar, no se si conoces su blog.
Un beso de maricacharros.
Impresionantes estas galletas Esther, no las he comido nunca pero se que son del tipo de galleta que a mi me gusta, si es que yo siempre tiro más a lo rústico que a lo fino, que le vamos a hacer. ;e las anoto para intentar hacerlas un dia porque tienen un aspecto increible. Un beso!
ResponderEliminarpara acompañar con un cafecito, tiene que ser gloria!! se ven ricas ricas. Bicos
ResponderEliminarQue ricas Esther, nunca las he probado pero tienen una pinta deliciosa, me encantan todas las galletas que haces se ven preciosas y apetecibles como estas que tengo que probar.
ResponderEliminarUn besito y feliz semana.
Te han quedado espectaculares y riquísimas, a mi me encantan!!!
ResponderEliminarBesos
Cocinando con Montse
Se ven increibles!!! a mi también mee encantan y seguro que yo también tomo nota para poder prepararlas en casa :-)
ResponderEliminarBesitos!!
Buenos días Esther. Vaya pinta. Aquí son tradicionales y se ven en las panaderías y pastelerías. Los llamamos rossegons. Están muy buenos y los tuyos, te han quedado perfectos. Me llevo un par. Besos.
ResponderEliminarSe ven perfectas!!! Estas galletas son muy crujientes al morderlas y cuando pillas una almendra tienen un sabor exquisito.
ResponderEliminarBesos y preciosa foto!!
Que maravillosas galletitas!!!!! te han quedado perfectas y seguro que estan de muerte.
ResponderEliminarBesos.
Que buenas te quedaron , tengo guardadas varias recetas porque me parece que me van a encantar y ahora viendo estas tuyas ya no me queda duda , se ven fantasticas
ResponderEliminarbesinos guapa
Esther, los carquinyolis, me encantan los has preparado de maravilla.
ResponderEliminaruyyyy si te los ve mi madre te los quita, pero que buenos te han quedado, me chiflan!!
ResponderEliminarMe encantan ¡¡¡ los de María tenían un aspecto estupendo, y a ti te han quedado igual de perfectos, tiene que estar deliciosos.
ResponderEliminarUn beso.
Unas galletas perfectas, me encantan las almendras, así que debo probar estas delicias, Besos!
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