PASTA FRESCA CON SALTEADO DE SETAS

Hoy comemos pasta y fresca, que os parece?? tengo mucho que aprender y mejorar. Pero me da igual porque nos encantó y nos supo a poco, lo malo es que tengo muy poco tiempo para ponerme media mañana con ella pero la verdad merece la pena ¡¡qué rica!!..Me envió mi querida Raquel unas setas y me pareció esta pasta la mejor idea para probarlas. Cómo nos han gustado tus setas reina, que sabor y que finura, el resto que me han quedado las guardé como oro en paño para otra ocasión. Muchas gracias cielo, para el año no dejes de recoger setas, son un manjar al alcance de pocos...

INGREDIENTES:
*Para la pasta verde:

• 100 gr de harina
• 60 gr de espinacas frescas
• 1 huevo
• 1 chorro de aceite de oliva

*Para la pasta de huevo:

• 100 gr de harina
• 1 huevo
• 1 chorro de aceite de oliva

*Para el revuelto de setas:

• Setas variadas (las mías secas e hidratadas)
• 1 paquete de beicon en tacos
• Pimienta
• 1 diente de ajo
• Aceite de oliva virgen

PREPARACIÓN:

Empezamos haciendo la pasta verde. En un cazo cocemos las espinacas lavadas, si son frescas (las mías eran congeladas y sólo las deje descongelar, las apreté bien con las manos y las sequé con papel de cocina) unos 2 minutos. Las escurrimos y las apretamos bien con las manos para que nos queden lo más secas posibles, incluso las podemos secar en medio de dos papeles de cocina, las trituramos bien. Colocamos la harina dentro de un bol, agregamos el huevo, las espinacas y un chorro de aceite. Con una cuchara de madera amasamos todos los ingredientes, pasamos la masa a una superficie de trabajo y amasamos bien, quedándonos una masa manejable. Hacemos una bola con ella y la envolvemos en film transparente y la dejamos reposar media hora.

Preparamos la pasta al huevo; colocamos la harina en un cuenco, junto con el huevo y el chorro de aceite, amasamos con una cuchara de madera y sacamos la masa a la mesa de trabajo donde la amasamos bien quedándonos una masa homogénea y manejable, hacemos una bola con ella y la dejamos reposar media hora envuelta en film transparente.

Cogemos un trocito de la pasta verde y la aplanamos un poco con las manos, la empezamos a pasar por la máquina de estirar la pasta empezando en el número 7 y vamos doblando y estirando hasta dejarla en el número 4 de grosor. Le colocamos a la máquina el cortador de pasta y cortamos tallarines,  espaguetis o lo que nos apetezca o la máquina nos permita. La dejamos secar unos 20 minutos (yo la puse a secar en un trozo de un palito de madera).

Colocamos una cazuela al fuego con abundante agua con sal y un chorrito de aceite, cuando empiece a hervir echamos la pasta y la removemos con cuidado, en dos tres minutos está lista, yo la voy probando para dejarla a mi gusto, se nota enseguida que está porque la pasta empieza a flotar por encima. La volcamos en un escurridor y la refrescamos bien debajo del grifo para cortar la cocción.

Hacemos el salteado; mis setas eran secas y las puse a hidratar 20 minutos, luego las escurrí y las sequé un poquito con un papel absorbente. Colocamos una sarten al fuego con tres cucharadas de aceite, añadimos el ajo limpio y laminado cuando empiece a dorarse agregamos el beicon en taquitos, le damos unas vueltas e incorporamos las setas, salpimentamos, removemos y añadimos la pasta. Salteamos todo el conjunto unos minutos y listo para comer..

Notas: La pasta  es la segunda vez que la hago. La de espinacas nunca en mi vida la hiciera y no quedó como me hubiera gustado; en cuanto al color, mis espinacas eran congeladas y no se si fue por eso o por lo que fue, no quedó un color homogéneo, pero si riquísima.

No controlo aún bien este tema de la pasta fresca y admito sugerencias, se que no quedo como yo quisiera. Os lo vuelvo a repetir estaba deliciosa, nada que ver con la seca, es que no tengo tiempo de lo contrario no volvería a comprar pasta.

Estas setas me las envió mi querida Raquel y no quería mucha preparación para ellas para apreciar todo su sabor ya que Raquel y su marido las recogen ellos mismos y las secan con mimo y cariño para luego tener para parte del año, estos chicos mucho saben. Ojalá estuviéramos cerca Raque que te ayudaría encantada a cosechar tan preciado manjar, estaban deliciosas.

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