INGREDIENTES:
- 350 gr de harina
- 40 gr de azúcar
- 2 huevos
- 30 gr de mantequilla derretida
- 60 gr de leche
- 2 cucharadas de anís (puedes poner ron u otro licor que te guste)
- La ralladura de 1 limón
- 1 pizca de sal
- Aceite de girasol para freír
- Azúcar glas para decorar
PREPARACIÓN:
Pon los ingredientes líquidos en un bol y bate con un tenedor. Ve añadiendo harina al bol de los líquidos poco a poco e integrando todo con ayuda de una cuchara, saca la masa a la mesa de trabajo y amasa con las manos bien hasta que nos quede una masa homogénea, como si fuera la masa de una empanada. Si ves que la masa esta muy blanda agrega un poco más de harina. Esto va a depender de las harinas y del tamaño de los huevos. No te va a variar el resultado por poner un poquito más-menos de harina, como te digo tiene que tener una textura parecida a la masa de empanada. Haz una bola con la masa y envuélvela en film transparente. Deja reposar unos 20 minutos a temperatura ambiente.
Si no tienes maquina para pasta, extiende la masa bien fina, cortas tiritas y enrollas. Yo la estire con la maquina; corta la masa en 4 trozos y empieza a pasarla por la ranura más ancha, dobla por la mitad vuelve a pasar por la maquina, así 2 veces, luego ve pasando por el resto de ranuras hasta la más fina. Pon el accesorio para tallarines y pasa la masa para que salgan ya cortados los tallarines, luego enrolla cada tallarín en el canutillo. Fríe los canutillos en abundante aceite caliente, sácalos a una fuente cubierta con papel absorbente. Deja enfriar un poco y saca los canutillos con cuidado, y pon las serpentinas en una fuente limpia y espolvorea con azúcar glas.
Notas: yo de canutillos utilizo cañas naturales, por esta zona hay muchas. Estas me las hizo mi marido, tienen de largo 10 cm y luego lijo bien las cabezas. Para conservarlas, una vez todas cortadas, se limpian bien y en una sartén se fríen con abundante aceite de girasol, hay que dejar que se frían bien, luego déjalas escurrir y que se enfríen, las vuelves a limpiar y se guardan en una cajita. Listas para hacer cañas, serpentinas o para cualquier dulce de canuto. La masa despega perfectamente, son una maravilla. Mis cañitas tienen muchos años y tengo 40. Si te interesan ya sabes hazte con unas cuantas cañas.
Cuando pases la masa por las ranuras de la maquina, siempre, bien enharinada para que no se pegue a la maquina, y cuando pases por el cortador lo mismo, es muy fácil.
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Buenos días Esther , han quedado unas serpentinas monisimas y que seguro que están bien ricas ,no veas como echo de menos a mis niños cuando me ayudaban en la cocina a preparar las rosquillas y otro tipo de dulces de masa , pero en fin es lo que hay
ResponderEliminarbesitos y buen finde
¡Espectaculares! REquieren su tiempo pero bien merecen la pena seguro a tenor de la buena pinta que tienen y de lo poco que duraron ¡Besos mil!
ResponderEliminarAcabo de ver estas serpentinas en IG y me han encantado, primero por lo bonitas, cuando me entran por los ojos... Después por lo ricas que deben estar, eso sin duda, ya me gustaría tenerlas delante, unas pocas caían.
ResponderEliminarFeliz finde. Un beso.
A mi me gustan más estas serpentinas que las de papel de colore!! jajaja. Ponme una poquitas para la merienda!! Bs.
ResponderEliminarQué ricas!!! Un vicio, empiezas a comer una y no puedes parar de hacerlo, te quedaron espectaculares.
ResponderEliminarBesitos fuertes
Maravilloso Esther me encanta estas serpentinas y no es mala la idea para hacer para una buena merienda y ademas que quedan de autentico lujo. Besitos
ResponderEliminarNunca tinha visto umas serpentinas de comer, achei tão lindas .
ResponderEliminarBom fim de semana
¡¡Hola Esther!! Qué curiosa receta y con cañitas y todo. Me han encantado, y eso de tener tus propias cañas preparadas para hacer este tipo de postres. Muy curioso, de verdad. Y vamos, es que te han quedado divinas estas serpentinas, entiendo que hayan volado, seguro que empiezas con una y terminas con todo el perol, ja, ja. Besitos.
ResponderEliminarEsther qué bonitas, mira que por aquí estas cosas son muy típicas, me refiero a los canutillos, que en mi casa llamamos gañotes, porque mi abuela era extremeña y así los llamaba ella. Lo de las cañas es una cosa tan tradicional, mi padre tiene bambú y unas cañas preciosas, que utiliza para todo, en el huerto son su aliada perfecta, yo las utilizo como soporte para alzar el cordel del tendedero, jajaja..., y mira, me has dado ideas para hacerme con un buen surtido de canutillos de bambú, y así poner en práctica tu receta.
ResponderEliminarBesos y feliz fin de semana.
Hola, para mí son una maravilla, nunca las había visto, son para pasarlo bien en la cocina y para disfrutarlas después.Besitos
ResponderEliminarQue viciosas deben de ser Esther, la pinta desde luego es deliciosas y las cañitas muy curiosas, por aquí no vi esas cañas pero le diré a mi marido que busque que me gusta la idea jajaja. Un beso corazón.
ResponderEliminarQue ricura Esther y originales, es la primera vez que veo las serpentinas y me parecen geniales 👍una que se va para mi carpeta 😉besinos wapa
ResponderEliminarAy pero que bonitas! Y las hiciste con cañas? Me encantan por la forma y ademas por esos mismo tienen que estar muy crujientes, que ricas!
ResponderEliminarBesos
Esther qué maravilla de canutillos. Hace años compré la máquina de hacer pasta y la probé una vez ¡madre mía qué rollooooo! y el tiempo que me llevó hacerla. Ahí quedó apartada en el trastero. Nunca hubiera imaginado que me podría servir para hacer estas bonitas serpentinas pero lo que tú dices, mejor hacer la receta con niños porque ya que requiere mucho tiempo al menos ellos se divertirán viendo como se hacen y luego una vez frías comiéndolas.
ResponderEliminarMe ha encantado la receta. Curioso también lo de las cañas ¡qué chuli!
Un abrazo y bonito día
Esther, pero cómo te quedan de bien estas serpentinas, visualmente son un espectáculo, y lo ricas que tienen que estar.
ResponderEliminarAlguna vez he intentado hacer algo parecido, pero no me doy buena maña, a ver si lo intento de nuevo tomando como referencia eso que dices de que la consistencia quede como si fuera la masa de una empanada, es un consejo estupendo.
No te imaginas lo bien que me vendría hoy esta cesta en casa para la merienda ;)
Abrazos!!
Que original Esther esas serpentinas,te han quedado de diez,que manitas tienes porque como dices tienen mucho trabajo detrás ,seguro que en pocos minutos desaparecieron todas .....yo si pudiera ya te habría cogido más de una para esta tarde con el café.....
ResponderEliminarmaravillosas amiga¡¡
besitos ¡¡
Hola Esther, que monada de serpentinas, te han quedado muy bonitas y es que entran por la vista de lo monas que son. Me las imagino una verdadera delicia.
ResponderEliminarBesos.